Todos tenemos una parte institntiva, básica y sumamente primitiva que asecha desde lo mas profundo de nuestro inconciente y de eso es presisamente de lo que estaremos hablando en este espacio, de nuestro cerebro primitivo, por supuesto que es importante no seder al impulso de escribir y/o decir barbaridades, atropellando los sentimientos de las personas; pues tengo la teoria aún no confirmada por expertos , que como escribes hablas y como hablas piensas, ¿Has observado y escuchado alguna vez a una persona a la que de verdad no le entiendes nada de lo que te esta diciendo? descartando el hecho por supuesto se trata de un idioma distinto , yo si y muchas veces. La boca es un instrumento maravilloso para la comunicación sin embargo es tambien un arma mortal sumamente eficiente, por ello, es vital para nuestras relaciones interpersonales cuidar lo que decimos, estar simpre vigilantes y concintes de la manera en que hablamos con los demas y a nosotros mismos, he sabido de casos en los que el contenido del dialogo interno de una persona puede llegar a aniquilarlo, tal es el caso, creo yo de los que atentan contra su propia vida, seguramente se ha escrito mucho acerca de la FUERZA DE LAS PALABRAS sin embargo, una palabra no basta para destruir ni construir o reconstruir una relación que ha sido lesionada con el arma punzante que puede ser la lengua, algunos opinan que un simple "perdón", un "disculpe" es suficiente para reparar el daño causado por una palabra hiriente, claro que generalmente las palabras no vienen solas, estan acompañadas por un tono y una actitud asi como de un gesto y hasta una postura corporal; pienso que si ademas de disculparnos actuamos en consecuencia de la genuina actitud de reflexion y arrepentimiento, la palabra "perdon" no solo es suficiente sino MÁGICA.